En un encuentro organizado por la Fundación Diálogos Estratégicos, que preside Rodrigo Herrera Bravo y la anfitriona Universidad Nacional de La Matanza (UNLaM), cuyo rector es Daniel Eduardo Martínez, disertaron el decano de los diplomáticos africanos en Argentina, Embajador del Reino de Marruecos Fares Yassir y la Embajadora de Sudáfrica Zanele Makina, entre otros.
Al participar del seminario “Argentina y África, un diálogo estratégico”, el representante marroquí en perfecto español comentó que durante muchos años los países del norte africano (entre los que se encuentra el suyo) miraban a Europa, pero que ahora proyectan y trabajan con objetivos propios de unidad continental como el gasoducto que unirá Nigeria con Marruecos o la propuesta a los países del interior africano para que cuenten con puertos marroquies los que no tienen salida al mar, tema que tanto entienden en nuestro continente los países hermanos como Paraguay y Bolivia.
Fares Yassir afirmó durante su exposición que para su país, “la soberanía alimentaria es un objetivo clave” y que “La economía marroquí y la bonaerense son complementarias”. En otro momento de su discurso destacó las relaciones excelentes a nivel comercial y diplomático. En el año 2022 el intercambio llegó a 1.600 millones de dólares, pero está todo en condiciones de multiplicar el intercmbio comercial.
Refiriendose a la potencialidad de su continente, el nor-africano habló de los recursos como el oro, el petróleo, los diamantes y los minerales huerfanos (clave para el desarrollo tecnológico futuro) que atraen el interes por invertir de Francia, China, Rusia e Indonesia.
Fares Yassir presentó la politica africana de Marruecos, en particular la cooperación Sur-Sur y las Iniciativas Reales. Al hacerlo explicó que el océano no nos separa, nos une.
Por otra parte “las tres provincias con las que hay mayor intercambio son Buenos Aires, Santa Fe y Córdoba, cada tanto cambian las posiciones en ese podio, pero los integrantes son siempre los mismos”, explicó el diplomático y aclaró que el principal producto marroquí es el fósforo.
De este elemento que en la agricultura se aplica como fertilizante, más del 50 por ciento que utiliza el complejo agroexportador argentino proviene del Reino de Marruecos.
“Nuestra reserva de fosfato es la mayor del mundo. Se calcula en 700 años, mientras que los otros grandes productores, Rusia y Estados Unidos, tienen reservas estimadas en 300 y 200 años respectivamente”, dejando en claro la importancia estratégica de este vínculo.En su alocución, el marroquí comentó que su reino necesita tecnificar la producción para mejorar rendimientos y hacerla más competitiva. Por ese motivo, manifestó que tienen un gran interés por la maquinaria agrícola de industria argentina.
“En la pandemia ya hubo intercambios a nivel de la industria automotriz y autopartista, porque su industria necesitaba insumos que provenían de otros mercados que entonces estaban cerrados. Es un precedente muy positivo”, agrega y evalúa que, a su criterio, “la política africana de Argentina es insuficiente”.
Un dato que suma a las posibilidades de profundizar las relaciones y realizar tareas conjuntas entre nuestros países, es que de los aproximadamente 38 millones de habitantes, la mayoría tiene el castellano como segunda lengua, además del árabe bereber, ya que ambas lenguas son de enseñanza obligatoria en las escuelas.
A su turno la diplomática de Sudafrica, Zanele Makina, celebró que el RIGI permitirá a las empresas mineras de ese país con inverisones en Argentina, como la Anglo Gold Ashanti, girar dividendos a su casa matriz sin trabas. En ese país, contó, la multinacional ítaloargenitna Techint, es uno de los principales jugadores en el sector de infraestructura, bajo la marca Tenova.
Para cerrar, Rodrigo Herrera Bravo afirmó: “Para la Fundación, la estrategia adecuada para Argentina consiste en crecer desde el Sur, con el Mercosur, con Latinoamérica, con el Sur Global, con los BRICS y en el G20, participando activamente en la discusión sobre la reformulación de los organismos internacionales surgidos en la posguerra”.
La jornada, claro está, se desarrolló en la Universidad Nacional de La Matanza cuyo rector la enorgullece, el Prof. Dr. Daniel Eduardo Martínez, Doctor en Ciencias Económicas – Posdoctor con mención en Marketing aplicado – Miembro de número de la Academia Nacional de Educación.